Total, que en lo que estamos de acuerdo es que con la cultura viva y la cultura de nuestros antepasados no se debe lucrar. Lo que en los últimos años se ha visto en el cerro del Fortín (o en la televisión, para los que no podemos pagar las entradas) es una prostitución folklorizada de nuestras costumbres, un proyecto mercadológico que al gobierno del estado deja muy buenos dividendos... Cada vez los precios aumentan, los boletos se venden por Ticket Master, se hacen dos funciones, las delegaciones que llegan a nuestra capital se encargan de su transporte , su alimentación y hospedaje mientras que el total de los recursos obtenidos van a las arcas del gobierno del estado.
Lo que ahora pretendemos, a través de la APPO, es un rescate pues nos han secuestrado nuestra fiesta, la han convertiodo en un espectáculo del "mexican curious" y eso no se vale.
Texto: Colectivo Zape