Cuando uno escucha una noticia donde se dice que el gobierno a destinado millones al campo se puede imaginar que estos recursos llegan a campesinos o que hay algún tipo de procedimiento para que los trabajadores de la tierra tengan una menor dificultad para realizar su trabajo con apoto en maquinaria, semillas, etc.
Pues en México no sucede esto, en los últimos años la mayor parte de los beneficios otorgados por el programa gubernamental PROCAMPO que ascienden a 1400 millones de pesos, son otorgados a empresas como Maseca, Cargill, Bachoco, Minsa, Gamesa, Sukarne, Gradesa, Gruma, Bunge y Sabritas.