Erick Nemesio Domínguez
 Froylán Medina Álvarez
 Demetrio Olivero Álvarez
 Humberto Santos Valladares
 Venancio Ramírez Cirino
 Manuel Flores Álvarez
 Miguel Ángel Flores Álvarez
 José Martínez Ramos
 Horacio Martínez Ramos
 Ernesto Nicolás López
 Pedro Nazario Domínguez
 Pedro Guzmán
 Isidro Mora Domínguez
 Feliciano Cirino Domínguez
 Fortino Verdía Gómez (quemado y después asesinado)
 Jonathan Verdía Gómez (quemado y después asesinado)
 Francisco Verdía Macías
 Ambrosio Verdía Macías
 Nicolás de la Cruz
 Nicolás de la Cruz, hijo
 Juan Faustino Nemesio
 Pedro Leyva
Además de las desapariciones de Gerardo Vera Orcino, Javier Martínez Robles, Francisco de Asís Manuel, Máximo Magno Valladares y Enrique Domínguez Macías, de 17 años de edad.
 Tantos asesinatos, en apariencia, parecen no importar a las autoridades estatales de Michoacán o a las federales; pero es una falsa impresión  ya que los promueven, los provocan y los mantienen impunes., y, por lo tanto, hay un sincero interés en continuar perpetrando crímenes contra este pueblo nahua.
 Las razones son claras: detener los procesos de autonomía de la región, sin las plagas electoreras promovidas por el IFE, sin los intereses de ningún partido político (opuestos a los de cualquier ciudadano de este país), sin la rapiña gubernamental y sin la explotación del crimen organizado. Ahí está la feliz comunión entre las organizaciones criminales y los gobiernos locales y las instancias federales, enemigos del trabajo honesto, de la madurez política de los ciudadanos y de la libertad, y tan amigos de la ambición, la corrupción y el poder paternalista que somete.
 El asesinato de don Trinidad ha demostrado esta complicidad ya conocida. Horas después de su desaparición forzada, se difundió la denuncia firmada por la Campaña: Alto a la Guerra contra Ostula, y por organizaciones e individuos solidarios con Santa María Ostula. Esta denuncia nos narra cómo, sospechosamente, el vehículo de la Policía Federal Preventiva, que escoltaba a los integrantes de las Brigada de Observación a Ostula, se separó momentos antes de las agresiones contra los brigadistas y de la desaparición de don Trinidad. En la denuncia se identifica a tres de los agresores: Prisciliano Corona Sánchez, El Chalano, Iturbide Alejo, El Turbinas, y Margarita Pérez, La Usurpadora. Estos tres criminales, el 14 de noviembre de 2011, fueron los mismos que golpearon y amenazaron de muerte públicamente  a don Trinidad. Las autoridades, con esta información, no hicieron nada. Con el asesinato de don Trinidad, la PGJE inició la averiguación previa 215/2011-U, en el que no se tiene el nombre de ningún sospechoso. La impunidad está presente. Autoridades y criminales son aliados.
 Llamamos a manifestarnos contra este brutal asesinato, contra la Guerra que el gobierno federal, estatal de Michoacán y el crimen organizado ejecuta contra el pueblo de Santa María de Ostula; llamamos a presionar por la justicia, incluso, a que nosotros mismos investiguemos todos estos hechos que la mismas autoridades no les conviene realizar, ya que ellas mismas son cómplices, ydenunciémoslas públicamente; organicémonos contra la represión.
 
ALTO A LA GUERRA CONTRA OSTULA
 Contra el despojo y la represión…
 la solidaridad.
 
Red Contra la Represión y por la Solidaridad
RvsR
		  	
                  
                  